In Xóchitl in Cuicatl
Novena escena
Xóchitl: ¡Oh, mi Cuicatl! Tus besos, revolotean alrededor de mi cuerpo como mariposas carnívoras que asaltan al vuelo mi piel temblorosa, la besan y la muerden, dibujan rosas rojas que florecen en mi pecho y arden al contacto con el tuyo.
Cuicatl: ¡Oh, mi amada Xóchitl! Mi dulce Flor. Me dejo seducir por tus manos y en tus caricias me pierdo. Mi cuerpo húmedo está sediento de placer. Mis dedos saborean tu piel, mi lengua se llena de éxtasis, me muerdo los labios, mis manos te acarician, tu mirada me perturba, solamente quiero hacerte gozar.
Xóchitl: Si, mi amado Cuicatl, siénteme amor, soy un volcán entre tus brazos, sigue amor, la noche se calienta, para saborearme lentamente.
Cuicatl: Eres la palabra en Flor que enciende el momento de la pasión. Al acostarnos me besas sin cesar, me arrancas de todo ropaje con tu boca…
Xóchitl: Cada noche desnudas mi cuerpo y perviertes mi mente. Mis pezones, son los manjares que te gusta saborear y al sentir la humedad de tus labios sobre senos, me haces emitir gemidos, agudos y extensos.
Cuicatl: Acaricio tus senos, tus pechos no escapan, son las víctimas permanentes de mis arrebatos, nuestras bocas se entrelazan. Me acomodo, te levanto sobre mí y quedas montada sobre mis caderas, y nos tocamos hasta que estoy dentro de ti, ahí nos mecemos, nos acariciamos nos volteamos, nos montamos, nos agarramos, nos tocamos, nos besamos, nos rasguñamos, nos agitamos, nos succionamos, nos exprimimos, y… ¡Ahahahahahahahahahahahah!
Xóchitl: Termínanos muy rico, sabroso. Seguimos con caricias y con besos, recuperando nuestra respiración. Me recuesto sobre tu pecho. Me estoy acariciando, puedo sentir mi interior, estoy empapada, estoy ardiendo por dentro.
CUICATL: Acerco mi corazón junto al tuyo, cuento nuestros latidos. Eres mi mejor poema.
Xóchitl: Te amo por siempre alma mía. Nuestra llama del amor está viva, la cual queda encendida en los tiempos de nuestra vida y nuestra pasión.
Continuará
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